La Otra Mirada
VIDEO: la marca de autos que impulsó la reina, en La Otra Mirada
Tras su fallecimiento, recordamos la marca que impulsó la reina Isabel II en Reino Unido. Mirá el video.
Elizabeth Alexandra Mary nació en Londres, el 21 de abril de 1926. Principal figura de la monarquía británica, la Reina Isabel II, fue referente de la historia contemporánea. Pero más allá de su injerencia en diversos ámbitos, pocos imaginan que su figura posibilitó la aparición de una particular marca de autos.
Tras la Segunda Guerra Mundial, en 1947, dos veteranos, Leslie Smith y Rodney Smith, se juntaron para crear una empresa, denominada Lesney. Compraron una fundidora de metales y allí apostaron a la suerte. Intentaron con la creación de diversos elementos, pero no hubo caso. El negocio era pésimo. Contrataron a un ingeniero y se dedicaron a fabricar piezas de automotores. Pero la empresa iba de mal en peor. La crisis originó la salida de Rodney de la sociedad.
El 2 de junio de 1953 no fue un día más para los británicos. La Reina Isabel II recibió su coronación. El acontecimiento fue impactante. Parece que para el ingeniero Jack Odell, que intentaba generar piezas provechosas para la alicaída empresa, sintió un estímulo sensacional. Emocionado por la novedad en la monarquía británica, desarrolló el primer coche de fundición en miniatura para la empresa. No fue otro vehículo que la carroza real en la que Isabell II fue trasladada el día de su coronación. Lo desarrolló en dos tamaños. Pero la más pequeña fue la gran novedad. En poco tiempo, logró comercializar más de un millón de unidades, una cifra inimaginable para la época.
En medio del auge por las carrozas en miniatura, la hija de Odell le comunicó a su padre que un compañero en el colegio le había pedido una miniatura que pudiera guardarse en una caja de fósforos. Así, la niña llevó una pequeña aplanadora, que entraba en una caja de fósforos. La gran aceptación empujó a la empresa a fabricar coches a escala 1:75 y con la idea de guadarlos en envases similares a las cajas de fósforos, se los denominó Matchbox.
A partir de allí, la empresa no paró de crecer. Llegó a vender más de un millón de autos por día en más de 100 países en su punto máximo. También incursionó en muñecas, soldaditos de juguete, aviones, pistas y juegos virtuales. La marca Matchbox se ha convertido en objeto de colecciones muy disputados en el mercado especializado. Un coloso de los pequeños autitos tuvo su origen en la Reina Isabel II, con la histórica carroza, como fuente de inspiración para un imperio de la producción de autos a escala.