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Una excavadora aplastó 68 autos de lujo ilegales
El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, que dirigió una campaña para combatir la corrupción y las drogas antes de ser elegido en 2016, continúa con sus medidas enérgicas contra la delincuencia y en su última arremetida encabezó un operativo en el que se destruyeron 68 autos de lujos provenientes del contrabando ilegal, que representaban un valor estimativo de casi 6 millones de dólares.
Lamborghini, Porsche, Mustang, BMW, entre otros vehículos de alta gama y súper deportivos, además de ocho motos, fueron aplastados por máquinas excavadoras hasta reducirlos a chatarras. Todo el proceso fue observado desde cerca por el presidente Duterte, quien procuró que las cámaras de televisión transmitieran en vivo la millonaria destrucción.
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"Hice esto porque quiero mostrarle al mundo que tiene un lugar viable de inversión y negocios", dijo el presidente filipino durante la recorrida al predio donde los autos estaban preparados para ser compactados. Según informaron desde el gobierno, la suma acumulada de los coches que fueron aplastados alcanzaba los 5.89 millones de dólares.
Esta no fue la primera vez que el mandatario ordenó la destrucción de autos importados ilegalmente. A comienzos de este año, otra tanda de máquinas sufrió el mismo destino. Jaguar, BMW y un Corvette Stingray fueron algunas de las doce piezas que fueron aplastadas por excavadoras. La Oficina de Aduana calculó en 2.76 millones de dólares la cifra aquella colección.
Autos de la corrupción. Joyas en destrucción…
