En una entrevista con Carburando, Oreste Berta recuerda detalles de la Misión Argentina en Nürburgring, a 50 años de la epopeya de los Torino, y a Fangio.
Una gran celebración se vivió en La Fortaleza, en Alta Gracia, con motivo de los 50 años de la Misión Argentina en las 84 Horas de Nürburgring, donde los Torino asombraron al mundo con su performance. Y quien estuvo en el centro de la escena de ese festejo multitudinario fue Oreste Berta, el gran responsable técnico de aquellos autos argentinos en el trazado alemán.
Berta, que además recibió el título Honoris Causa por parte de la Universidad Tecnológica Nacional, dialogó con Carburando y recordó detalles de aquella experiencia imborrable para el automovilismo nacional.
“Nunca se me ocurrió que podía pasar esta celebración medio siglo después. Para mí Nurburgring fue muy diferente de todos los demás. Yo estuve un mes de trabajos de locos. El sábado terminó la carrera, el lunes estábamos en Mercedes-Benz con la prueba de un vehículo, de ahí nos fuimos a Suecia para otro proyecto. Me enteraba de algunas cosas que pasaban en la Argentina porque conmigo estaba Patricio Peralta Ramos. Pero yo estaba en otra cosa. Yo viví lo de Nürburgring muy distinto al resto del país”, comentó Berta.