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¿Por qué Toyota quiere ganar Le Mans con el auto híbrido?
No sólo se busca la gloria deportiva. Claro está que los grandes resultados en el automovilismo deportivo se trasladan a la industria. En imagen, en tecnología aplicada a los productos. Pero también es una forma de demostrar la certeza que el camino elegido es el correcto. Por ello Toyota Gazoo Racing pretende la victoria en las 24 Horas de le Mans. El automóvil híbrido es el sendero optado por la empresa japonesa. Y quiere cristalizarlo con el honor en la pista francesa.
¿Cuán lejos está el Toyota Hybrid TS050 de un auto convencional de la marca? Se sabe que Toyota cuenta con el Prius como punta de lanza en el mercado para imponer el vehículo híbrido. Pero en el concepto, no hay tantas diferencias, al margen de las evidentes entre un prototipo de competición y uno comercial.
Al margen de la velocidad anhelada en la competición, la confiabilidad es el aspecto que obsesiona. Toyota cree que previo al paso a los automóviles eléctricos, se debe contemplar el uso de los híbridos. Es una meta que se impuso con el Prius. El TS050utiliza una mecánica con el mismo formato, aunque lógicamente es mucho más potente.
El funcionamiento del impulsor que acelera en Le Mans es el de combustión de 2,4 litros (el tanque tiene una capacidad de 62,5 litros). El doble turbo lo sobrealimenta para alcanzar los 500 cv, apenas el 50 por ciento de su potencia total, ya que la otra mitad es proporcionada por la parte eléctrica.
Como se encuadra en la categoría de LMP1, el Toyota TS050 Hybrid, a diferencia de los automóviles de igual categoría pero convencionales, puede utilizar más combustible, por lo que resulta clave el tratamiento de la energía eléctrica para obtener ventaja. Además la batería de ión-litio es de gran capacidad, por lo que debe almacenar una gran cantidad de energía para utilizarla de forma permanente.
Ese concepto es fundamental para trasladarlo a los vehículos de calle híbridos, híbridos enchufables o directamente eléctricos para optimizar la energía y mejorar la autonomía. La eficiencia se multiplica con los procesos de regeneración de energía (por ejemplo con los frenos).
Su diseño busca optimizar el flujo de aire, combinando elementos como las entradas y el alerón delantero para conducirlo por las zonas óptimas, la aleta central para mejorar la estabilidad, el fondo plano para hacer efecto succión y pegarse al asfalto o el voluminoso alerón que busca aumentar la carga aerodinámica. El despeje es de apenas 1050 milímetros.
El Toyota Hybrid TS050 apenas pesa 875 kilos. Es cada vez más común que los vehículos de calle estén fabricados con materiales livianos como fibra de carbono. En la competición el magnesio gana terreno para mejorar este aspecto, muy importante por cierto, para mejorar, en definitiva la performance del automóvil.
La conexión entre el automovilismo deportivo y el auto de serie es múltiple y directa. Toyota busca la gloria deportiva. Y la certeza de que una victoria en Le Mans avalará su camino por la propuesta híbrida.