Opinión
Ni autoridad, ni poder
La debilidad de la CDA del Autómovil Club Argentino fue aprovechada por la Asociación Corredores Turismo Carretera y se desató la polémica. Ciabattari hizo explotar lo que se veia venir
No hay dudas que las declaraciones vertidas por Javier Ciabattari fueron las más explosivas de los últimos tiempos dentro del automovilismo. El responsable del equipo FDC de TC 2000 no tuvo pelos en la lengua y fue al hueso. Manifestó lo que todos piensan pero que nadie se animaba a decir. Javier fue directo cuando le consultaron sobre la grieta en el automovilismo. Habló de un culpable y no le tembló la voz a la hora de nombrarlo: Carlos García Remohí, la máxima autoridad de la Comisión Deportiva Automovilística del Automóvil Club Argentino.
El ACA es el ente fiscalizador máximo en nuestro país dentro de la actividad del deporte motor pero no se nota. La ausencia del titular de la CDA, desde hace años, no fue buena en todo sentido. Las categorías fiscalizadas por dicho ente nunca se sintieron acompañadas en el lugar de los hechos. Su autódromo es su oficina de Av. Del Libertador.
Según fuentes consultadas no más de 5 veces fue una carrera de Turismo Nacional. En el TC 2000 su presencia solo existía en los 200 kilómetros y en algún que otro callejero, mientras que al Turismo Pista fue en dos oportunidades. La única salida fija era cuando se llevaba adelante la fecha del mundial de Rally en la provincia de Córdoba.
Naturalizar, el otro problema
Es cierto que si la cabeza que debe pensar y manejar el automovilismo deportivo falla, todo lo demás va a fallar o va a tener dificultades como está teniendo parte de esta actividad. Pero lo que está ocurriendo no viene pasando desde hace poco tiempo. Si miramos hacia atrás el camino que se recorrió fue largo y todos somos culpables. Todos sabíamos que el sistema tenía inconvenientes para encontrar un rumbo. Se sabía que el camino que se transitaba era dificultoso, pero poco se hizo. Lamentablemente los inconvenientes, al igual que la Argentina, comenzaron a naturalizarse. “Esto no tiene arreglo” es la frase que más se escuchó en los últimos tiempos.
El que pierde su silla…
Si hay otra cosa que no deja dudas es que la Asociación Corredores Turismo Carretera pasó a tener un rol protagónico. La capacidad, la presencia continua y la habilidad de la dirigencia de la ACTC los llevó a tener más autoridad y más poder. Podrán decir muchas cosas pero se lo ganaron. Aprovecharon la debilidad de la vereda de enfrente, crecieron en categorías, por lo tanto en cantidad de pilotos, tiene los contactos con las gobernaciones, con el estado nacional, están en dialogo con los clubes y hacen algo que estos tiempos es clave. Resuelven. Después podremos discutir las formas y los modos que manejan, pero los resultados están a la vista. La diferencia que existe entre los dos fiscalizadores es abismal. Hoy el alumno supero al profesor y esto se debe a que este no tiene ni autoridad ni poder.
