Turismo Carretera
Moriatis: “La política tiene miedo de tomar una decisión”
“La cuarentena me posibilitó que ahora tire magia en la parrilla”, bromeó Emanuel Moriatis al referirse a estos tres meses de inactividad automovilística producto del aislamiento social preventivo obligatorio. En el programa Carburando en Casa, el ex campeón de Turismo carretera admitió: “No sabía ni hacer un pancho, y ahora me la rebusco muy bien en la cocina”.
Más allá de las particularidades de la cuarentena, Moriatis se refirió a la situación del automovilismo en este paréntesis tan extenso al que se somete: “Yo estoy bastante comunicado con la Asociación Corredores de Turismo carretera (ACTC). El doctor (Rodolfo) Balinotti nos comunica los protocolos que se presentan. Llamo a Hugo (Mazzacane), a (Fernando) Miori y me atienden y me cuentan lo que sucede. No pasa por ellos el regreso a la actividad. Es una decisión política, pero la política tiene miedo de tomar una decisión. Viste como es esto, después se echan la culpa unos a otros. Tienen miedo a decir sí, porque está todo dado para ir a correr.
¿Qué pasará con el automovilismo después de esta problemática? Moriatis se explayó: ““Yo creo que habrá cambios en el automovilismo. Costará, pero habrá que sacarse la careta y el pensamiento individual para unir al automovilismo. Por ejemplo habría que usar un juego de neumáticos para dos o tres carreras. Si cuando corrimos los 1000 kilómetros lo hicimos así. Si pensamos en el conjunto y no en la ventaja individual, será mucho más beneficioso”.
Sobre la dramática resolución del título 2009 de Turismo Carretera, en la que se consagró campeón en Buenos Aires, Moriatis recordó: “La definición del título del TC fue el destino. Cuando a uno le tiene que tocar, le toca. Yo lo único que quería era ganar la carrera, sin pensar en el campeonato. Y la famosa mancha de aceite termina decidiendo la situación”.
Y destacó: “Después de la serie no me tenía fe por el campeonato. Me olvidé del título. A tal punto que tomaba riesgos que si pensaba en la corona, hubiese tenido más recaudos. Por ejemplo cuando protagonicé una maniobra muy arriesgada con Fontana”.
Y Moriatis agregó; “Cuando agarré el aceite y me fui, ahí pensé que ya se había terminado todo. De hecho cuando me despisté me fui por el pasto, pero pensaba más en no molestar que en entrar rápido. Y cuando salí a la recta miré por el espejo y no venía nada. Y apareció Ortelli, que marchaba décimo. No entendía nada. Me hablaban por la radio con tantos nervios que no entendía qué sucedía”.