Opinión
Me suena a una decisión dictatorial
Desde hace mas de 50 años he vivido con intensidad y pasión el automovilismo deportivo, en distintas épocas y en todas sus versiones. Con el TC tuve la ocasión de ver, desde las cupecitas, famosos nombres que fueron llevando a la categoría hacia un lugar preponderante de la historia, hasta la era actual.
Nadie hubiera imaginado que a un Traverso, que durante algún tiempo no participo en Turismo Carretera, se le hubiera negado la invitación, que si bien en ese tiempo no existía reglamentariamente, algunas veces los dirigentes tomaban determinaciones discutibles, pero que no se podían discutir!!!!
Hoy el TC es muy profesional en todo aspecto, desde los dirigentes hasta los equipos y pilotos. Controlan un negocio que se ha hecho cada vez mas grande, apoyados en algunos momentos por el gobierno nacional, que como en el fútbol, aportaron cifras importantísimas a la categoría. El TC es una categoría cerrada, cuyo manejo es mas empresarial que deportivo y donde tenés que pagar una licencia para habilitar un auto, un motor, un piloto, un equipo, un preparador. En esta condición, sus integrantes saben que tienen que acogerse a las reglas estrictas de quienes legislan.
Visto desde el punto de vista deportivo es imposible comprender que, un piloto que ha corrido años en ella y que incluso ha ganado como Juan Bautista De Benedictis, deba primero correr en la categoría promocional, para poder recién reintegrarse a la actividad mayor.
Con que vara se mide, quien si y quien no. No me extraña, pero me suena algo dictatorial. Yo se que es difícil que, con alguna excepción como Matías Rossi, los pilotos den su punto de vista. Pocos se juegan, sabiendo que el día de mañana, podrían, pagar caro ese desliz. Así las cosas, debemos aceptar que estas reglas se manejen de acuerdo al sentimiento y gusto de quienes son los responsables de llevarlas adelante.
