Turismo Carretera
La primera revolución del Turismo Carretera
La historia del Turismo Carretera lleva 82 años de vida y sigue contando, en ella pasaron muchas cosas y muchos nombres, desde Ángel Lo Valvo, el primer ganador, hasta Agustín Canapino, el último campeón. Sin embargo, se puede hacer un parate en 1966.
Desde su creación en 1937 se utilizaban las llamas “Cupecitas”, autos realizados a fines de la década del 20 y 30, que hicieron famosos a los hermanos Juan y Oscar Gálvez, Juan Manuel Fangio y hasta Dante y Torcuato Emiliozzi, es decir 30 años de carreras.
Antes de llegar a 1966, tres años antes, el TC superó por primera vez los 200 kilómetros por hora de promedio, logrado por Dante Emiliozzi y “La Galera”, como se la denominó a su auto. Este vehículo ya estaba modificado y no era la típica “Cupecita”, algo que mostraba de que se venía un cambio a la modernización.
En 1965 apareció el “Chevitú” (“Chevy Two”), preparado por José Froilán González y manejado por Jorge Cupeiro, algo totalmente novedoso para el Turismo Carretera y comenzaba la primera revolución. Ese año Cupeiro fue subcampeón de los Emiliozzi, que lograron su cuarto título consecutivo.
En 1966 el campeón fue Juan Manuel Bordeu con “La Coloradita”, una cupé totalmente modificada, que le hizo frente por última vez a los autos “modernos”, ya que fue la última “Cupecita” campeona.
Con diferentes pruebas en distintos autos, aparecieron los Ford Falcon, Chevrolet 400, Valiant y los Torino, de producción nacional. Esta última marca se quedó con el título de 1967 de la mano de Eduardo Copello y Oreste Berta, rompiendo así, la hegemonía de Ford y Chevrolet desde la creación de la categoría. Su debut ya había sido glorioso, debutó y ganó el 26 de febrero en San Pedro con Héctor Gradassi.
Todavía quedaban algunas “Cupecitas” dando vueltas, pero el dominio de los autos compactos fue letal para los creadores de la rivalidad de marcas que aún perdura en la actualidad. Claro está, que esos vehículos antiguos ya no eran lo mismo y se convirtieron en prototipos con base del 1930 pero la tecnología del momento.
El título de Copello fue el primero de la “era moderna” y nunca más una “Cupecita” fue campeona. De esta manera, el Turismo Carretera hizo su primer gran cambio en la historia. Una modificación que se fue innovando hasta la actualidad, 52 años después, cuando todavía se sigue usando el Torino, acompañado por el Falcon, la Chevy y la Dodge.