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El público rechaza el Halo
El Halo, nuevo elemento de seguridad implementado por la Fórmula 1 para esta temporada parece no agradar a nadie. El nuevo objeto se experimenta como una molestia no tan necesaria. En primer lugar, por los pilotos, que no dejaron de quejarse, aunque a medias. Y además por lo que es estéticamente inaceptable para la mayor parte de los fans de la categoría.
Sin embargo, existe una alternativa para el futuro que las autoridades tienen en estudio y es la que comenzará a utilizarse en IndyCar, denominada windscreen, que consiste en una pantalla aeronáutica transparente en fibra especial, que ya fue testeada por Scott Dixon.
La protección es una pantalla aerodinámica, como se usa en el jet G650 y en los cazas F16, hecha de un material especial, el Opticor, una lámina que envuelve policarbonato y que optimiza la transparencia de la superficie. Una tecnología que neutraliza los problemas críticos que surgieron en la primera prueba con el 'shield' en F1, en el momento de Sebastian Vettel en Red Bull, con el alemán que denunció las deformaciones visuales a altas velocidades por acusar mareos.
Al respecto, Scott Dixon aseguró: "Es difícil de explicar. Es obvio que cuando se mira a través del parabrisas algo cambia. no es exactamente un efecto de aumento, pero casi. El cerebro y los ojos se tienen que ajustar, pero con el tiempo en la pista, me acostumbré. La reducción del ruido del viento también me sorprendió, lo que hace que la experiencia sea más cómoda".
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En realidad, el windscreen de IndyCar es un aerokit objetivamente seguro y confiable, así como más respetuoso de la historia estética de la Fórmula 1, y terminaría proporcionando mayores garantías también en términos de seguridad pura. Porque el Halo, además de ser molesto para la visión, tiene algunos problemas críticos. Puede ser útil para proteger al piloto de un neumático suelto o de encuentros cercanos con el alerón delantero, como en los contactos recientes Alonso-Raikkonen (Austria) y Alonso-Grosjean (Spa). Pero para escombros y piezas pequeñas depende de confiar en la suerte, como quedó demostrado en la simulación de que el Halo no habría podido hacer nada en el incidente en Hungría en el que un elemento del auto de Barrichello golpeó el casco de Felipe Massa.
Uno de los pilotos más críticos en la F1 fue Max Verstappen, calificándolo de absurdo, una idea sin sentido que también afecta el peso y el centro de gravedad y que podría crearle problemas, siendo más alto que otros pilotos.
Los estadounidenses de Liberty Media podrían considerar cambiar el rumbo hacia el windscreen en 2019 o 2020, una vez que esté bien testeado en la IndyCar, para intentar suavizar conflictos, a los ya generados por la eliminación de las promotoras y los entredichos con Ferrari, que llegó amenazar con su ida.
