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El escándalo Dieselgate asoma en Porsche
Aún el grupo Volkswagen no se repuso del escándalo que protagonizó en los Estados Unidos, conocido como el Dieselgate, donde se había comprobado la utilización de un software en el motor 2,0 TDI, que reconocía si era sometido a una prueba de gases contaminantes, la historia parece repetirse en Europa. El ministro de transporte de Alemania, Alexander Dobrindt, confirmó que Porsche, una de las filiales de VW, instaló un sistema que controla la medición de gases en la SUV Cayenne. A raíz de la acusación, ordenó la revisión de 22.000 vehículos.
La agencia de noticias alemana DPA, informó que Dobrint explicó que el dispositivo en cuestión era capaz de detectar si era sometido a una medición de gases en laboratorio, y ahí se activaba. Pero ello no sucedía cuando la unidad estaba bajo la conducción normal.
De confirmarse todo ello, el Grupo Volkswagen vuelve a involucrarse en un escándalo, conocido como Dieselgate. Según la agencia alemana, el modelo en cuestión es el Cayenne 3 litros TDI. La modificación del mapeo de la inyección de combustible para reducir los niveles de torque (momento de fuerza máxima del motor) y potencia permitían que los valores obtenidos durante los testeos estuviesen muy por debajo de lo que terminaba emitiendo en un uso normal.
El nuevo escándalo comienza a tomar dimensión horas después del sorpresivo anuncio de Porsche de alejarse del WEC, la categoría más relevante a nivel mundial.
Aquí no terminarían los problemas, ya que puede expandirse a otras terminales alemanas. Según se consigna en ese país, hay una acusación que indica que Audi, BMW, Daimler (Mercedes-Benz), Porsche y Volkswagen habrían mantenido reuniones secretas para burlar las leyes de competencia. Esa denuncia está bajo investigación de la Comisión Europea.
