Dakar
El baño del Dakar, un lugar muy particular
En el mundo Dakar todo es por demás llamativo. Cada detalle es atractivo para aquellos que apenas conocen las características de este particular evento que cada año despierta la atención del mundo. Entre los detalles llamativos, se encuentra el baño del campamento Dakar. Un lugar donde hombres y mujeres terminan conviviendo sin tapujos ni vergüenza, ya que los tiempos apremian y la visita es rauda.
Claro, las comodidades no abundan allí. Siempre mantiene la forma de herradura la disposición de los baños químicos, que envuelven los pequeño lavabos, que funcionan cuando se acciona con el pie una suerte de sopa para que salga el agua por la diminuta canilla.
Los espejos son muy pequeños. Varios optan por afeitarse y utilizan la pantalla negra del celular para reflejarse cuando se rasuran. El personal de limpieza está por demás activo. El desfile de usuarios es constante, ya que hay 3000 personas en el campamento Dakar. Y la limpieza es fundamental para mantener el lugar en condiciones.
A tres metros de los lavabos se ubican los migitorios, que disponen de cuatro ubicaciones por pilar. Al aire libre, bajo el impiadoso sol del desierto o bajo las estrellas, los hombres descargan mientras las mujeres ingresan en el sector como si nada estuviera ocurriendo. Cada uno está con sus tiempos.
En el fondo, las duchas. Allí dentro se disponen de cabinas que están conectadas con camiones cisterna con agua. Y desde allí desciende para la ducha, tan necesaria, por supuesto. Por la mañana y por la noche, la baja temperatura hace que se escuchen algunos gritos de quienes entran y hacen contacto con el frío. Y por la tarde, el calor también se contagia al agua.
El particular mundo Dakar, también con los baños. Donde no abundan las comodidades (muchos aún buscan alguna y no la encuentran), una particularidad sobre este ambiente tan llamativo como asombroso.
